jueves, 8 de diciembre de 2016

Los problemas del sistema carcelario en Brasil y América Latina.

A partir de los asesinatos en las cárceles de los estados de Rio Grande do Norte, Roraima y Amazonas, en Brasil, analizaremos los problemas del sistema carcelario en Brasil y América Latina con la Dra. Christiany Pegorary, profesora de derecho penal de la universidad Católica de Campinas, Brasil.
                      
    
   El año nuevo nos recibió con 60 presos asesinados en una rebelión en el Complejo Penitenciario “Anísio Jobim” (Compaj) en el estado del norte brasilero de Amazonas. El conflicto, cuyas imágenes de presidiarios decapitados conmovieron al mundo, comenzó en la tarde del 1 de enero y se extendió por 17 horas. Ante esto, mientras los medios de comunicación, de forma simplista, adjudicaban el hecho a una disputa de territorio entre la organización criminal “PCC” (“Primeiro Comando da Capital” de San Pablo) con otro grupo criminal, “FDN” (“Familia del Norte”, asociado al “CV”, “Comando Vermelho”, de Rio de Janeiro), el ministro de seguridad de Brasil, Alexandre de Moraes, decía tener todo bajo control y atribuía los hecho al consumo de marihuana, su obsesión personal.
Ministro de Justicia de brasil Alexandre de Moraes cortando plantas de marihuana en Paraguay.

     Sin embargo, a pesar del optimismo del ministro nada estaba bajo control: tan sólo 4 días después, el 6 de enero estalló otra rebelión en la cárcel Agrícola de Monte Cristo (Pamc), en la zona rural de Boa Vista, estado de Roraima, en el extremo norte del país, con un saldo de 33 presidiarios muertos. Y poco días después, el 14 de enero, una nueva rebelión en la cárcel de Alcaçuz, en el estado de Rio Grande do Norte, sumaría más de 30 asesinatos.
   
    No obstante lo impactante de los números, las muertes en los presidios brasileros son, lamentablemente, moneda corriente. El año pasado el número oficial de asesinatos fue de 392.

    La causa de estas muertes va más allá de la rivalidad entre grupos criminales. Para los jueces del Superior Tribual de Federal de Brasil,  Marco Aurélio y Gilmar Mendes, entre muchos otros jueces y juristas, las muertes son el resultado de una política de estado basada en el encarcelamiento como fórmula mágica para enfrentar la criminalidad. De hecho, Brasil ha escalado del quinto al primer lugar en Sudamérica en promedio de presos por habitante. Según el Institute for Criminal Policy Research en 2010 eran 253 detenidos por 100.000 habitantes, en 2105 el promedio subió a 301. 

    A esto se le suma un cóctel compuesto por un elevado número de detenidos sin sentencia definitiva, otros con sentencia cumplida pero detenidos por la inacción de los defensores oficiales, incumplimiento de la ley de ejecución penal, subejecución presupuestaria, etc. junto a medios de comunicación que desinforman y diseminan un clima de odio.

  De esta situación en Brasil, que en mayor o menor escala es común a muchos países de Latino América, vamos a hablar con la profesora de Derecho Penal y Procesal Penal Christiany Pegorari Conte.

¡Que lo disfruten!




"La buena de la semana"
En esta nueva sección vamos a referir noticias de destaque relacionadas con los derechos humanos, laborales o de la ciudadanía. Esta semana la buena noticia es el indulto del saliente presidente norteamericano Barak ObamaOscar López Rivera, un preso político puertorriqueño, tras 35 años de prisión.

Oscar López Rivera es un líder independentista puertorriqueño, considerado el preso político más antiguo del mundo. Nació en 1943, fue veterano en la Guerra de Vietnam y en 1976 se integró a la lucha clandestina por la independencia de Puerto Rico en las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN). En 1981 fue capturado por el FBI y condenado a 70 años de prisión por el delito de “conspiración sediciosa”.


La orden de liberación del último revolucionario boricua de la Guerra Fría en cárceles estadounidenses se dio esta tarde, junto a un alto número de conmutaciones e indultos anunciados por la Casa Blanca.

El prisionero 87651-024 – quien durante los últimos años ha estado encarcelado en la prisión de Terre Haute (Indiana) y ha cumplido 35 años en prisión-, quedaría en libertad en cuatro meses.

“Estoy muy feliz y abrumado de la emoción”, indicó el congresista demócrata Luis Gutiérrez (Illinos), para quien López Rivera y su hermano José son amigos y mentores.

“Había veces en que la esperanza era difícil de encontrar, pero mi esposa Soraida siempre tenía fe de que llegaría este día. Ahora está claro que Oscar volverá a reunirse con su familia y podrá caminar libre entre los puertorriqueños”, indicó Gutiérrez.

La cárcel de Terre Haute está a unas tres horas y media de Chicago, donde López Rivera fue arrestado hace 35 años y siete meses.

López Rivera fue convicto de conspiración sediciosa por sus vínculos con el grupo clandestino Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), que reclamó la autoría de decenas de atentados en EEUU que causaron seis muertos.

A López Rivera se le detuvo el 29 de mayo de 1981 en la localidad de Glennview, un suburbio de Chicago, al no detenerse en una intersección. Se le ocupó una pistola. Hasta entonces llevaba cinco años en la clandestinidad.

López Rivera siempre negó haber tenido sangre en sus manos y nunca fue convicto por hacer daño a nadie. “Si las agencias federales tuviesen una huella digital mía asociándome con cualquier cosa en que haya habido muertos, estuviera sentenciado a cárcel de por vida”, mantuvo en la más reciente entrevista con El Nuevo Día, el pasado 1 de diciembre.

En entrevistas con El Nuevo Día, López Rivera ha indicado que tan pronto saliera de prisión iría primero a ver a su familia en Chicago, a donde llegó cuando tenía 14 años. Pero, después se irá a vivir a su pueblo natal de San Sebastián, en Puerto Rico. “Soy pepiniano…(Quiero) disfrutar de Puerto Rico, de mi familia. Pero, a mí me gusta trabajar. Tengo unas destrezas – organizar, ayudar a los jóvenes – que quiero compartir con la gente”, dijo.

Su hija Clarisa, de 45 años y que le conoció en prisión poco después del arresto, irá a buscarlo en mayo a Terre Haute, junto a su tío José López Rivera, director del Centro Cultural Puertorriqueño en Chicago, y su abogada Jan Susler. Los tres han encabezado la lucha por la liberación del prisionero independentista.

El articulo completo en: http://www.nodal.am/2017/01/puerto-rico-el-independentista-oscar-lopez-rivera-es-indultado-por-el-presidente-barack-obama/